Colgante de Turquesa Tibetana en plata de ley. Armonizador del Chakra 5º Garganta.
Medidas aproximadas: 25mm largo x 15mm ancho x 10 grosor.
Peso aproximado: 5grs.
La Turquesa nombre procedente del francés “Pierre Turquoise” piedra turca; aunque su origen se remonta a la antigua Persia, entraba en Europa por Turquía. Mineral del grupo de los Fosfatos conformada por Aluminio hidratado y Cobre. Sus colores variarán de los azulados a verdosos, a mayor porcentaje de Cobre más azulada y si posee más Hierro, deshidratado, es más verdosa. Desde la antigüedad 6000 A.C. hasta hoy, los ejemplares con un azul-cielo de buena calidad, compacto y uniforme, son muy considerados, valorados y con altísimas cotizaciones. En Irán, antigua Persia, en la cima de la montaña Ali-mersai a 2012 metros de altura y a 25km de Mashhad encontramos una de las minas más importantes de Turquesa azulada de gran calidad. Son conocidas con igual popularidad, las Turquesas Americanas trabajadas hoy, por indios Navajos en Arizona, las encontramos con vetas, rugosidades o motas de Óxidos de Manganeso y/o Limonitas negras. Las Turquesa Tibetana, más verdosa y común en el planeta, no cotiza tan fuertemente. Respetada en todo el Nepal, se dona o regala como símbolo de amistad, respeto, buena salud y amor. Los principales yacimientos de Turquesas los encontramos en: Afganistán, China, Egipto, Estados Unidos, Irán, Kenya, México, Perú, Polonia, Rusia, Tíbet. Su energía lánguida e imperceptible; considerada por muchas sociedades del planeta, como un mineral muy valioso que energiza vitalidad, valor y esperanza; sana y protege. La Turquesa, hoy, energiza la vitalidad regenerando todo el organismo, favorece el descanso y buenos sueños. Es uno de los grandes e importantes minerales azulados asociados a toda la zona de nuestra Garganta. Energiza los Chakras 5º Garganta equilibrando, regulando nuestra auto-expresión favoreciendo comunicaciones claras y sinceras; y también al Chakra 6º Tercer Ojo irradiando, de inmediato, nuestro gran poder oculto, la intuición. Calma nuestra mente. Facilitará la expresión sentimental, emociones, deseos y pensamientos profundos de una manera ordenada. Esta frescura, templanza y calma es muy indicada para niños y/o seres excesivamente estresados, apaciguando tensiones, favorece el perdón, calma, paz y la reconciliación sabia y muy dulce, regulará muchas disfunciones de nuestro cuerpo. En muchos países ubicados en Asia Central, la consideran una importante “fetiche”, gran símbolo de valor y esperanza, proporciona éxito al hombre enamorado, pretendiente de la mujer virtuosa, hermosa de corazón; infunde amor, sensatez y al hombre mucho tesón que le permitirá avanzar e invertir en su nuevo proyecto de vida. La Turquesa evita y protege de vibraciones negativas…la mala suerte. Es el gran “Talisman” para atraer suerte y positividad a su vida, proporciona bienestar en todo nuestro cuerpo, sobre todo si viajamos frecuentemente o realizamos viajes muy largos tratará estados de cansancio y agotamiento. Todo movimiento se transforma en electromagnetismo positivo neutralizando las energías negativas y amplificando las positivas.
Un colgante de Turquesa Tibetana en plata de ley 925 único…Una joya espectacular.
Atención:
Todas nuestras fotografías intentan mostrar la realidad del producto. No perjudicando su calidad y reafirmando su condición de “único”.
Todos nuestros minerales son naturales.